Es un juego de origen japonés. Consiste en tener 100 velas prendidas (te gastas toda la plata en velas) en círculo y jugar de a mucha gente.
Cada uno tiene que contar una historia de terror, entre todos tienen que saberse 100 (no se precisan 100 personas, obviamente) y que cada vez que alguien termine una historia, se apague una vela soplándola.
Cada uno tiene que contar una historia de terror, entre todos tienen que saberse 100 (no se precisan 100 personas, obviamente) y que cada vez que alguien termine una historia, se apague una vela soplándola.