Cuando tuve que elegir un nombre de este Blog, fue muy sencillo. Llevo una vida recorriendo cementerios de todos los pueblos por los que he pasado y especialmente, aquellos que yacen en ruinas, solitarios, totalmente abandonados. Es ahí donde encuentro el verdadero sabor de la muerte.
LA SEGUNDA MUERTE, aquella insobornable hija del tiempo y del olvido. Porque ya nadie "recuerda", porque ya nadie llora ni extraña. Y es así en la ruta del destino...Mueres y lentamente, vuelves a morir definitivamente. Queda, en algunos casos, un nombre desconocido, una vieja y herrumbrada cruz, pastizales, trepadoras enredaderas en los rincones húmedos, donde la vida no se da por enterada y continúa su inexorable marcha.
Rita Mercedes Chio