No necesariamente tiene que ser una gran mansión, oscura y siniestra. Cualquier casa, denominada "Embrujada", puede tratarse de una simple y urbana vivienda, donde haya actividades paranormales. Estas actividades tienen varios orígenes. Pueden ser causados por una persona con poderes o capacidad para comunicarse con otras dimensiones y hacer que los espíritus entren a nuestro mundo para luego quedar atrapados en él. Este es uno de los motivos por lo que se recomienda mucha prudencia en relación al espiritismo, juegos invocadores o casos similares.
También existe la posibilidad del regreso de un espíritu a la casa donde pasó sus mejores momentos o donde muriera de manera violenta. En estos casos, se recomienda la participación de un experto, para que le abra una puerta dimensional y pueda salir para siempre del lugar.
Los espíritus en todos los casos, son peligrosos, ya que nunca se logra saber cual es su demanda o actividad entre los vivos. Se debe tratar con sumo respeto a los seres del más allá cuando regresan a visitarnos.
Se manifiestan con sonidos, brisas frías, corriente de aire, cambio de temperatura ambiental, movimiento de objetos o voces lejanas.
En muchas ocasiones, la presencia de un espíritu, no es determinante para hacer de un domicilio, una casa embrujada. Los muertos también aparecen para anunciar algo que ha de suceder o que ya ha sucedido. Y por lo general, luego de comunicarse, se retiran para siempre.
Muchas de las famosas casas embrujadas, son mitos, que terminan siendo leyendas.
Y en varias ocasiones, se confunde el fenómeno de la telequinesis con el tema que estoy abordando y nada tiene que ver, ya que es un caso relacionado a la psiquis humana, mayormente en la adolescencia.
Rita Mercedes Chio
