domingo, 7 de febrero de 2016

El Diablo dejará de ser un Demonio.

La sabiduría del Diablo

                                                


Harto de estar harto, de cargar sobre su espalda los males de la humanidad, porque si haces algo bueno es obra de Dios y si yerras, como lo hacemos todos, él es el único responsable. 

Presentó su renuncia indeclinable y no tuvo éxito. 
Dió reportajes muy adecuados y criteriosos, tampoco tuvo suerte. 

Sigue siendo muy necesario para los humanos, poner todas las miserias fuera de cada uno, por lo tanto, insistimos  su presencia entre nosotros, para lavarnos las manos y culparlo de absolutamente todo. Así es el dogma y como todo dogma, no se discute. 

Sabe que de momento,es inmortal. Sabe que es bello y demasiado inteligente, para el credo con el que se enfrenta. 

El Diablo ha decidido, de una vez por todas, ser cuasi humano y mortal. Aunque se vengan abajo todos los esquemas del cristianismo en todas sus ramas representativas. Aunque hace ya más de 35 años, la iglesia Católica aceptó en un concilio muy privado, LA NO EXISTENCIA DEL INFIERNO. (Esto es real).
El hermoso ángel oscuro, sombrío y cansado, sabe qué hacer para dejar este miserable destino que se le ha impuesto por siglos y siglos. 
Cuenta con muchos nombres que lo identifican. Cuenta con un sin fin ignorantes adoradores de sus propias miserias y falencias, puestas en su persona. 

EL DIABLO HA DECIDIDO ENAMORARSE. 
Y dentro las reglas de la fe, un ángel no debe enamorarse para seguir siendo ángel y eterno. 

Los hubo, tiempo atrás, aquellos que también desobedecieron el dogma y dejaron de ser enviados alados. 

Una vez enamorado, llevará una vida mundana (en el mejor de los sentidos) amará, formará una familia, envejecerá y morirá. 
Veremos a quién se le echará la culpa de cada aberración humana, de ahí en más...

Lo que nunca sabrás, es si ese hombre que anda merodeando tus días, galante y seductor, se trata de quien estoy hablando. 
No lo sabrás! Pero puedo dar fe, que ha de saber tratarte como a una reina. Porque el Diablo,  sabe más por viejo que por Diablo. 
Enhorabuena para ambos! 


Rita Mercedes Chio
Derechos reservados.